Informaciones obtenidas de diferentes publicaciones, libros y seminarios.

MAGNESIO de origen MARINO. 

El Magnesio marino es un extracto puro de agua de mar y el resultado de un proceso muy largo (más de 5 años) y natural conocido desde hace miles de años.

Todo comienza en las marismas saladas del Negev (Israel) que producen la sal.

El primer año, el agua del mar se dirige hacia las marismas saladas. La exposición al sol y a la temperatura exterior provocan la evaporación del agua hacia la superficie. Los cristales de sal que suben a la superficie se “recogen” para formar la sal conocida para el consumo humano. El líquido que queda, aún sin cristalizar, se desplaza hacia otras marismas para un segundo ciclo de evaporación. Durante el segundo y el tercer año, se recogen siguiendo el mismo proceso los cristales de sulfato de sodio y de magnesio. Al cabo de lo 5 años, quedará agua con cloruro de magnesio que ya no formará cristales. Esta agua de mar residual se transfiere a los depósitos donde evaporará y por electrolisis se librará del ion cloro, para que  cristalicen las otras sales de magnesio.

El Magnesio es un de los elementos mayoritarios en las aguas del mar (más de 20 g. por tonelada) y se encuentra tanto en forma de Cloruro, Sulfato, Carbonato e Hidróxido, obviamente disociado Mg +2 por la elevada solubilidad de sus sales. (Kramer, 2002)

Tras una última fase de purificación y estandarización al 58.8% de magnesio elemental, el producto se convertirá en polvo blanco muy fino mediante un proceso de purificación/secado.

La composición media del magnesio marino esta formado por sales de iones Sulfato, Carbonato, Cloruro e Hidróxido.

El magnesio es esencial para muchas de las funciones del organismo. Presente en todas las células del organismo, (en total, el cuerpo de un adulto dispone de aproximadamente 25 g de este mineral), participa entre otras en más de 300 reacciones enzimáticas. Es indispensable para mantener el equilibrio nervioso y muscular.

El magnesio marino contribuye a la relajación muscular (25% almacenado en los músculos). Permite además conservar en buen estado la estructura ósea (60% del magnesio del organismo está almacenado en los huesos) ). El resto se reparte entre el cerebro y los órganos vitales como el corazón, el hígado, los riñones, etc. El magnesio ejerce además un efecto regulador sobre el tránsito intestinal.

La carencia de magnesio es causa de un estado generalizado de cansancio y estrés. Una dosis diaria equilibrada de magnesio proporciona descanso, serenidad y energía. Está especialmente indicado para los deportistas que debido al ejercicio físico tienen una gran pérdida de magnesio con el esfuerzo.

Nuestro magnesio marino extraído del agua del mar después de su desalinización y lagunaje es filtrado, evaporado en vacío y cristalizado, sin la adición de conservantes o de productos químicos.

El exceso de calcio disminuye la absorción de magnesio.

El exceso de fósforo también produce la mala absorción de magnesio así como también los fosfatos de las bebidas artificiales.

TAURINA.

La taurina es un aminoácido que se halla en forma natural en el cuerpo y en los alimentos (principalmente en la proteína animal). Difiere de la mayoría de los otros aminoácidos, en que no se incorpora a las proteínas, sino que existe como un aminoácido libre en la mayoría de los tejidos animales y es uno de los aminoácidos más abundantes en el músculo, en el corazón, en las plaquetas, y en el sistema nervioso en desarrollo.

La taurina se sintetiza en las células a partir del aminoácido azufrado metionina, en una ruta metabólica en la que participan una serie de moléculas azufradas y donde ocurren diversas  reacciones de metilación, decarboxilación y oxidación.

Hay evidencias de que sirve como neurotransmisor (un mensajero químico para el sistema nervioso), es un regulador de la sal y del equilibrio del agua (osmorregulación) dentro de las células y un estabilizador de las membranas celulares, ya que se ha demostrado que la taurina puede tener un rol importante en el cambio de algunas propiedades de la membrana, como la fluidez, la capacidad de transporte de algunos iones – como el Magnesio – y la regulación de la actividad de algunas enzimas enlazadas a la membrana, así como también en el mantenimiento del potencial de la membrana y el pH intracelular.

VITAMINA B 6.

La importancia de añadir vitamina B 6 junto al magnesio estriba en la sinergia que entre ambos se establece. Es una de las responsables del equilibrio neurovegetativo, e indispensable en el metabolismo del magnesio, y a su vez, éste último, es necesario para una correcta absorción de la vitamina B6.

La vitamina B6 interviene además en el correcto metabolismo de proteínas, azúcares y ácidos grasos. Tiene un importante papel como factor antianémico. Los factores que pueden provocar un déficit de vitamina B6 son, entre otros, una dieta desequilibrada, acentuándose cuando es rica en proteínas, toma de ciertos anticonceptivos orales y otros medicamentos, estrés, etc… Podemos concluir que el magnesio junto a la vitamina B 6 es una fórmula adecuada necesaria en la sociedad actual, no sólo como elemento coadyuvante en determinadas patologías, sino dándo un merecido valor preventivo en el mantenimiento de un buen estado de salud.

– LAS OPINIONES AQUÍ PRESENTADAS SOLO TIENEN FINES INFORMATIVOS.

– NO REEMPLAZAN NINGÚN TRATAMIENTO NI CONSEJO MEDICO.

– SIEMPRE SE DEBE CONSULTAR A UN PROFESIONAL DE LA SALUD.

– NO SE AUTOMEDIQUE.